Eficiencia energética: hasta un 30% menos de pérdida de calor/frío, lo que se traduce en un ahorro directo en calefacción y climatización.
Confort térmico: hogares más estables y agradables durante todo el año.
Protección ambiental: contribución a la reducción de emisiones al disminuir el consumo energético.
Cumplimiento normativo: nuestros productos permiten a constructoras y propietarios adaptarse a la nueva Reglamentación Térmica (RT) 2025 y a los Planes de Descontaminación Atmosférica (PDA) vigentes en diversas regiones del país.
Instalación práctica: productos autoadhesivos y de fácil uso, sin necesidad de herramientas complejas.
Durabilidad: materiales resistentes al desgaste, diseñados para mantener su rendimiento en el tiempo.